Stations of the Cross

03-06-2016Pastor's LetterFr. Don Kline, V.F.

Once in a while I step into the chapel to pray and will spot a man or a woman quietly making their way in prayer through the church praying the Stations of the Cross using a variety of devotional books as they go. That "walk" of course, recounts Our Lord's journey to the cross to satisfy the debt of our sinfulness.

Their devotional journey often takes me back to my experience as a Catholic grade school student when I prayed with my family on Fridays during Lent. It also reminds me of being a pilgrim in the Holy Land when I journeyed the streets of the old city praying the Stations with other pilgrims. It is an intense experience today as many of the stations are in the Muslim district. In addition, in such an intensely multi-religious city, most walk by swiftly and unmoved--that is, unless they wish to sell a few cheap souvenirs.

I've often suspected that during the actual crucifixion, it wasn't much different. For a crucifixion wasn't a particularly significant event. It was just another harsh day in the Roman Empire that some avoided and others watched seemingly for entertainment.

The Stations are displayed in most all Catholic Churches for personal and communal worship. They can be as simple as a little cross or elaborate works of art that show the particular station in detail.

Interestingly, the Stations of the Cross were only displayed in Churches starting in the 17th Century. The number of stations varied, depending on the intention of the artist or the community that displayed them.

Of course, to discover where this devotion began we must travel to Jerusalem. The Via Dolorosa, as it is known, was reverently marked out from the earliest times. It has been a devotional goal of pious pilgrims since the days of Constantine.

Tradition asserts that the Blessed Virgin used to visit the scenes of Christ's Passion every day. In the 4th Century, St. Jerome wrote about the crowds of pilgrims from all countries who visited the holy places in his day. Monasteries, which were often places of pilgrimage, also erected meditative chapels for monks and the spiritually curious alike. Today, perhaps the most widely attended Station's service takes place at the Coliseum in Rome, the last of which is often observed during Holy Week by Pope Francis and his predecessors.

We pray the Stations of the Cross each Friday during Lent at 9:00am and 7:00pm and live Stations of the Cross on Good Friday at 2pm in the courtyard.

Of course, you are also invited to come to chapel and pray them yourselves or as a family. We have a variety of Stations of the Cross Booklets, but you can also just print one off of the internet. It is a way to bring our Lord's passion alive and concrete. It is a way to more fully realize that this event happened out of love for each of us!

God Bless,
Fr. Don Kline V.F.

Las Estaciones de La Cruz

De vez en cuando me paro en la capilla a orar y mientras veo a algún hombre o una mujer quien calladamente hace sus oraciones a través de las estaciones de la Cruz utilizando una variedad de libros devocionales veo cómo van avanzando. La Caminata, por supuesto, recuenta el viaje de nuestro Señor hacia la cruz para satisfacer la deuda de nuestros pecados.

Su viaje devocional a menudo me lleva de vuelta a la experiencia como Estudiante de grado en la escuela católica cuando con mi familia oraba en viernes durante la cuaresma. También me recuerda el inicio del peregrinaje por tierra santa cuando viaje por las calles de la vieja ciudad orando en las estaciones con otros peregrinos. Es una experiencia intensa dado que muchas estaciones se encuentran dentro de los distritos musulmanes, esto se hace más intenso en una ciudad con diversidad de religiones, se debe de caminar con cambios repentinos y a veces casi sin movimiento, esto es, a menos que ellos quieran vender algunos de sus suvenires. .

A menudo sospecho que durante la crucifixión, no era muy diferente. Dado que la crucifixión no era un evento significativo. Era solo otro día común en el imperio Romano que algunos evitaban otros miraban solo por entretenimiento.

Las estaciones de muestran en muchas de las Iglesias Católicas y es son punto de culto. Pueden ser tan simples como una pequeña cruz o elaboradas como obras de arte que muestran el detalle de la estación.

Interesantemente, las estaciones de la Cruz solo comenzaron a exhibirse en las iglesias a principios del Siglo XVII. El número de estaciones varia, dependiendo de la intención del artista o de la comunidad que las exhibe.

Claro está, para descubrir donde inicia nuestra devoción debemos de viajar a Jerusalén. La Vía Dolorosa como se le conoce, esta reverentemente marcada desde las primeras épocas. Ha sido una meta devocional de los Peregrinos desde los días de Constantino.

La Tradición indica que la Santísima Virgen Maria solía visitar las escenas de la Pasión de Cristo cada día. En el siglo IV, San Jerónimo escribió hacer de las multitudes de peregrinos de todos los países que visitaban los lugares Santos en sus tiempos. Monasterio, que son lugares de peregrinaje, también se erigieron capillas de meditación por monjes y los que tenían culto espiritual similar. El vía Crucis más que tiene más visitantes tenga lugar en el coliseo Romano, La cual es usualmente observado durante la Semana Santa por el Papa Francisco y sus predecesores.

Oremos a las Estaciones de la Cruz cada Viernes durante la cuaresma a las 9:00 AM y a la s7:00 PM y vivamos las estaciones e la Cruz el Viernes Santo a las 2:00 PM en nuestro atrio.

Claro está, están también invitados a venir a la capilla a orar por ustedes mismos y con su familia. Tenemos una variedad de Libros sobre las Estaciones de la Cruz, pero también pueden imprimir alguno de internet. Es una forma de traer la pasión de nuestro señor en vivo y en concreto. Es una forma de entender lo que sucedió en ese evento por a mor a cada uno de nosotros.

Dios los Bendiga.
Fr. Don Kline V.F.

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