Dear Brothers and Sisters in Christ,
It has been an interesting August. Many families and students have kept me apprised of their return to school on all levels—grade school, high school and college. Some students asked for special blessings for safe travels and a good year. Let us pray for all our students, in school and in religious education. May they make holy decisions that will help them grow closer to Jesus.
As we begin this new school year, I have been thinking about education and catholic education in particular. In general, my thoughts return that baptismal rite of children in the Catholic Church when parents commit to the Christian education of their children. The rite reminds parents of their duty to bring their children up by teaching them the law of Christ and His Church.
At St. Joan of Arc, over the next few weeks, our school will open and our religious education programs will begin another year. Parents, please remember that the work of these important apostolates are supplemental to your efforts on the home front. In other words, the bl essi ngs of my reli gi ous education only assisted my parents in their work at home. My parents taught me to pray. My parents taught me to live a moral life. My parents instilled in me the need to serve others in Christ's name. My parents taught me how to repent from my sins. My parents opened my eyes to the vocation of priesthood that, in the end, has made me the most happy. I pray that this parental call for your children is one of your top priorities during this academic year!
Student's Prayer, by St. Thomas Aquinas
Creator of all things, true source of light and wisdom, origin of all being,
graciously let a ray of your light penetrate the darkness of my understanding.
Take from me the double darkness in which I have been born,
an obscurity of sin and ignorance.
Give me a keen understanding, a retentive memory,
and
the ability to grasp things correctly and fundamentally.
Grant me the talent of being exact in my explanations and the ability to
express myself with thoroughness and charm. Point out the beginning,
direct the progress, and help in the completion.
I ask this through Christ our Lord.
Amen.
God Bless,
Fr. Don Kline
Queridos Hermanos y Hermanas en Cristo,
Este ha sido un mes muy interesante. Muchas familias y estudiantes me han tenido informado de su regreso a la escuela—a escuela elementaría, secundaria, y universidad. Algunos estudiantes me pidieron bendiciones para un buen año escolar. Oremos todos por estos estudiantes en las escuelas y en los programas de educación religiosa. Oremos para que tomen decisiones buenas y santas que los ayuden a crecer y acercarse más a Jesús.
Con el comienzo de este año escolar, yo he estado pensando mucho acerca de la educación y la educación católica en lo particular. En general mis pensamientos regresan al rito del bautismo de cada niño en la Iglesia Católica, cuando los padres se comprometen la educación Cristiana de sus hijos. Este rito les recuerda a los padres su responsabilidad de criar a sus hijos en la fe y enseñarles la ley de Cristo y de la Iglesia.
Aquí en nuestra parroquia de Santa Juana de Arco, en unas semanas, se abrirá la escuela y las clases de cate- cismo comenzaran un nuevo año. Padres por favor recuerden que el trabajo de estos apostolados importantes solo es un suplemento a sus esfuerzos en su hogar. En otras palabras, las bendi ci ones de mi propi a educación religiosa cuando niño, solo asistieron a mis padres en su trabajo en casa. Mis padres me enseñaron a orar. Mis padres me enseñaron a vivir una vida moral. Mis padres me enseñaron la necesidad de servir a otros en el nombre de Cristo. Mis padres me enseñaron a arrepentirme de mis pecados. Mis padres me abrieron los ojos a la vocación del sacerdocio, que al final me ha hecho tan feliz. Yo espero y oro que este llamado de sea una de sus prioridades para sus hijo en este año académico.
Oración para el Estudiante, por Santo Tomas Aquino
Oh Dios, fuente de la sabiduría,
Principio supremo de todas las cosas.
Derrama tu luz en mi inteligencia
Y aleja de ella las tinieblas
Del pecado y de la ignorancia.
Concédeme penetración para entender,
Memoria para retener, método para aprender,
Lucidez para interpretar y expresarme.
Ayuda el comienzo de mi trabajo,
Dirige su progreso, corona su fin,
Por Cristo nuestro Señor.
Amén.
Que Dios los bendiga,
Padre Don Kline